Todo ser humano tiene un proyecto de vida, algunos lo piensan y planifican, otros simplemente lo viven sin pensar en ello. Existen los que realizan uno de gran calidad que les llena el alma y les permite vivir una gran variedad de eventos y llegar a conocer la felicidad, a si mismos y a explorar a fondo la vida. Existen otros a los que la vida les pasa por el costado y se cuelgan viendo televisión, durmiendo, en un trabajo mediocre, sin conocerse, sin formar buenos vínculos con las personas y no conocen de que se trata la vida en realidad.
Es fundamental de vez en cuando darnos un momentito para pensar en el proyecto de vida que vamos llevando, y al que apuntamos. Factores muy importantes de nuestro proyecto son:
- La carrera que estudiamos.
- El trabajo que elegimos.
- Los afectos; ya sea amigos, familia y pareja.
- Las actividades que realizamos en nuestro tiempo libre, nuestros hobbies y pasiones.
- Conocernos a nosotros mismos.
A estos hay que regarlos, ya que son fundamentales para nuestra felicidad y una vida sana. ¿Hace cuanto no frenas a pensar bien hacia donde estás yendo y si en realidad es para ese lugar que querés ir?